“Si quieres vivir una vida feliz…”

tony redes



“Si quieres vivir una vida feliz…”

“Si quieres vivir una vida feliz, átala a una meta, no a una persona o a un objeto”… Albert Einstein

¿Por qué se está tornando tan difícil ser feliz? ¿Por qué se habla en estos tiempos, más de “sobrevivir” que de “vivir”?

¿Qué impide que el ser humano de hoy no se sienta satisfecho, al contrario, que se viva en una constante insatisfacción, buscando “algo” que no sabe qué es?… antes pequeños logros le transmitían momentos felices, ahora parece que ha logrado todo… que nada le falta por obtener, motivo tal que aumenta su insatisfacción, frustración, enojo, temores y falta de sentido por vivir.

¿Por qué tendemos a culpar a los demás de nuestra propia infelicidad, de aquello que no se ha podido alcanzar?

Considero que el no ser feliz en este tiempo se debe a varios factores… a decisiones no bien tomadas, a la elección de personas no idóneas, a vivir por vivir sin un análisis de la vida misma.

Los factores que creo relevantes para ser feliz en la vida son:

  • No se han estipulado metas, o si se ha hecho, las metas que se proponen son muy confusas o en verdad imposibles de llevar a cabo.

  • La gran mayoría de veces, las metas propuestas están atadas a personas u objetos.

  • Si dichas metas no son obtenidas, no optamos por sustituirlas u olvidarlas.

Definitivamente para poder ser felices hoy en día es necesario no sólo de nuestra actitud ante la vida, sino también de identificar conscientemente con qué personas nos estamos relacionando… ¿Por qué elegimos tal tipo de personas como amistades? ¿Por qué nos sentimos tan bien en ciertos tipos de ambientes? ¿Por qué si la pareja elegida es tan nociva, tóxica, pesimista para mi vida… aún sigo con ella?

La vida del ser humano siempre tendrá mayor sentido y por ende se buscará una mayor satisfacción de ella, cuando mayor claridad poseamos ante el motivo o misión de nuestra propia existencia, del por qué aún estamos aquí transitando por esta ruta de vida…. “el descubrir por qué aún sigo caminando por esta vida, es donde radica la mayor felicidad”.

Obtener esa claridad de quién soy me llevará a aceptar quiénes están detrás de mí, del ser humano que hoy soy. Nadie puede vivir plenamente si no ha aceptado sus raíces, su origen, sus antepasados, independientemente de cómo sean o hayan sido… aceptar no significa vivir unido al otro, ya que no siempre es posible… aceptar significa ser consciente de dónde vengo… para comenzar a construir mi futuro.

Constantemente nos la pasamos creando metas. Algunas son inmediatas, otras a mediano o largo plazo, pero como seres humanos que vivimos regidos bajo un espacio temporo-espacial, nos es necesario proyectarnos hacia el futuro… siempre estamos impulsándonos al futuro, de ahí que no se acepte una pareja que decida no tener hijos, ya que nos han hecho creer que los hijos son los mismos padres trascendiendo a través del espacio y tiempo… si no hay hijos, no eres alguien inmortal ¿será?

Lo primero para crear una meta es tener la capacidad y responsabilidad de verse hacia el futuro. Después de verse hacia el futuro, vendrá un análisis de aquello que se tiene para poder alcanzar esa meta elegida… ¿De qué habilidades dispongo como individuo? ¿De qué espacios y tiempos? ¿De qué personas dispongo para poder llegar a realizarlas?

Jamás olvides que si tus metas están ancladas a personas… las personas cambian constantemente, así que te llevarían a hacer cambios que quizá no siempre estés dispuesto a hacer. El otro, el ser humano, no siempre se mantiene o cambia conforme a nuestros propios intereses, lo que hace cambiar las metas propuestas… ¿Estás dispuesto a cambiar tus sueños, tus ideales, tus metas a causa de un ser humano impredecible, ambivalente, cambiante?

Jamás olvides que si tus metas las anclas a un objeto… los objetos no siempre se adecuan a nuestras propias necesidades o ideales. Una gran mayoría de ocasiones, hasta los mismos objetos, por más que los estiremos, manipulemos, no dan el ancho que quisiéramos de acuerdo a lo que traemos en mente, al ideal que deseamos cubrir… ¿Qué pasará cuando ese objeto pierda interés o caduque en la jerarquía de valores que te habías propuesto?

Así que… ¿deseas ser feliz?… recordemos lo que nos dice Jorge Bucay en su libro “Cuentos para pensar”…

“Yo soy quien soy.

Yo no soy el que quisiera ser.

No soy el que debería ser.

No soy el que mi mamá quería que yo fuera. Ni siquiera soy el que fui.

Yo soy quien soy”…

“El otro es quien es.

Es decir, el otro no es quien yo necesito que sea.

El otro no es quien fue.

El otro no es como a mí me conviene.

El otro no es como yo quiero.

El otro es como es”…

En resumen… por ningún motivo dejemos de tener metas.

Si las metas las vamos a anclar a personas u objetos, preparémonos para experimentar la frustración, la decepción, la rabia de no ser comprendidos… la angustia de que los demás no harán las cosas como nosotros las haríamos, que al final los objetos no se adecuen a los ideales que teníamos…

Hoy creo firmemente que la felicidad consiste en aceptar y respetar al otro… permitiéndome escucharlo, permitiéndole hablar…  creando una empatía que me conduzca a forjar metas que desde mi área de confort no lograría discernir sin la ayuda de la diferencia del otro, de los demás.

“Si quieres vivir una vida feliz, átala a una meta, no a una persona o a un objeto”… Albert Einstein

Suscríbete al blog por correo electrónico

Introduce tu correo electrónico para suscribirte a este blog y recibir avisos de nuevas entradas.

Únete a otros 174K suscriptores