GUANAJUATO, 14 DE JULIO DEL 2022.-Cada uno con su historia, pero con la misma esperanza de ganar dólares para apoyar a sus familias, cuatro migrantes guanajuatenses que murieron al interior de un tráiler en Texas hoy son velados y recordados en sus pueblos de origen.
Omar Rico Almanza de Cortazar, María Guadalupe Montero Serrano de Valle de Santiago, José Guadalupe Narciso López Muñiz y Efraín Ferrel de Celaya, son quienes ya están con sus familiares.
Desde la noche del miércoles, llegaron los primeros dos cuerpos de los migrantes fallecidos en Estados Unidos; Omar y Guadalupe llegaron a las instalaciones de la funeraria donde fueron “arreglados” y horas más tarde, llevados cada uno a su casa.
En total fueron siete los guanajuatenses que perdieron la vida en San Antonio.
Omar Rico Almanza
Con banda de viento, fue recibido el cuerpo de Omar Rico, en Cortazar. Amigos y familiares esperaban su llegada desde la tarde del miércoles.
Entre lágrimas y el sonar de la música, empleados de la funeraria bajaron de la carroza, el ataúd de Omar y lo colocaron en un espacio, en el primer cuarto de su casa, en la colonia Chapingo.
María Guadalupe Montero Serrano
María Guadalupe, también llegó por la noche con su familia en la comunidad la Enmarañada, en Valle de Santiago.
Lupita, como le llaman amigos y familiares, tiene dos hijos, de 10 y 12 años. Ella, buscaba mejorar su calidad de vida, yéndose a Estados Unidos.
Sin embargo, perdió la vida junto con más migrantes, al quedarse dentro de la caja de un tráiler en San Antonio, Texas.
Su padre, habló poco, comentó que su hija era muy alegre. Lamentó lo sucedido pero dijo sentir un poco de alivio al tener el cuero Lupita, ya con ellos.
«Es un pequeño alivio, yo no la quería así, pero Dios me la mandó así y así la recibo, no tengo palabras, (…) nadie se merece esto, pero bueno, así pasaron las cosas y lamentablemente no se puede volver atrás, no nos queda más que seguir adelante y luchar por los que nos quedan todavía».
La mañana de este jueves, se ofició una misa de cuerpo presente en la iglesia de Santiago Apóstol y después, fue sepultada en el panteón municipal.
Durante la madrugada del jueves, Efraín Ferrel y José Guadalupe Narciso López Muñiz, ambos celayenses, regresaron a sus casas, en las comunidades de Crespo y San Juan de la Vega, respectivamente.
José Guadalupe Narciso López Muñiz
Entre cantos religiosos y cohetes, familiares y amigos de José Guadalupe Narciso López Muñiz, recibieron su cuerpo en la comunidad de San Juan de la Vega, en Celaya, Guanajuato.
Hoy, tras varios días de espera, su familia recibió el cuerpo para realizar su funeral y el viernes, será sepultado.
José Guadalupe de 35 años, tiene esposa y dos hijos a quienes, vecinos de su comunidad han apoyado.
Su cuerpo es velado en su casa, ahí se acomodó la entrada para colocar su ataúd y alrededor de él, su fotografía y varios arreglos florales regalados por amigos.
En entrevista, su papá, con la mirada triste, contó que años atrás, José ya había estado en Estados Unidos, su inquietud de regresar allá, fue porque su ex jefe lo buscó, le envío dinero para que pudiera pagar su traslado.
Comentó que ambos, trabajaban en el campo, recolectando zanahorias, iban hasta Zacatecas.
«Trabajamos aquí en la zona, ahorita estamos en Zacatecas, pero terminando nos regresamos para acá».
Indicó que, dos de sus hijos viven en Estados Unidos, por lo que es común la intención de migrar allá, pues él, también ya había trabajado en dicho país.
Efraín Ferrel
Vestidos de negro y con lágrimas en los ojos, familiares de Efraín Ferrel, recibieron su cuerpo en la comunidad de Crespo, en Celaya, Guanajuato.
Efraín es el cuarto guanajuatense que fue repatriado de San Antonio, Texas, tras perder la vida en un tráiler.
En el funeral, suena la música norteña, el grupo no deja de tocar canciones que hablan de la migración en México.
El ataúd de Efraín, esta rodeado de coronas, arreglos florales y su fotografía. Como un sello particular, le fue colocada una lata de cerveza sobre el féretro.
Efraín, es de Cortazar, pero tenía un año de casado y se fue a vivir a Crespo, lugar del que e originaria su esposa. Ellos, no tuvieron hijos.
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