APASEO EL GRANDE, GTO. 09 DE NOVIEMBRE DEL 2018.- En la comunidad de Caleras de Amexhe, se observan las máquinas, los montículos de tierra y los hombres trabajando en la zona en donde se edifica la planta de la armadora japonesa Toyota.

Tras las especulaciones sobre el paro de labores de los trabajadores, en un recorrido por la zona, se pudo constatar que la obra continua bajo la amenaza de un posible paro.

Con más de un mes sin recibir sueldo, los trabajadores explicaron que tienen miedo de que “se acabe” el trabajo y se queden desempleados, por eso han aguantado que se acumule el adeudo de sus salarios, con la esperanza de que se los paguen más adelante.

Sin embargo reconocen que quizá es necesario algo de presión, para que las empresas constructoras (aseguran que son varias) les paguen.

En tanto, los proveedores de material siguen llegando a la zona, la maquinaria pesada y los vehículos continúan las obras, aplanando y preparando el espacio de 600 hectáreas en donde se ubicará la planta nipona.

A dos años de que inició la construcción de la empresa (14 de noviembre del 2016), un aplazamiento de inicio de operaciones, el cambio de vehículo a armar y un ajuste en los alcances de la inversión, la llegada de Toyota en Caleras de Amexhe ha transformado la zona con caminos, puentes, señalética y otros servicios.

De acuerdo a lo planeado, la planta dispondrá de seis pozos de agua, dos gasoductos, una estación de la Comisión Federal de Electricidad para el suministro eléctrico, además de contar con una conexión directa con la empresa Kansas de ferrocarril.

La última comunicación de la empresa, a través de un comunicado, fue que la obra registra un avance del 50%, sin precisar monto de inversión aplicada.

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