JERÉCUARO, GTO.- Jerécuaro y el sur de Guanajuato ya ha sido zona de ataques a servidores públicos como el ocurrido contra el alcalde electo Rogelio Sánchez Galán.
El viernes santo del 2008 un grupo armado atentó contra los funcionarios encargados de la oficina de la Policía Ministerial en Jerécuaro, en este lugar murieron dos policías y una secretaria, en su huida uno de los delincuentes falleció, además de que durante la persecución fallecieron dos policías de Acámbaro.
Unos de los primeros casos que incluso se conoció en otros países fue el homicidio del entonces director de Seguridad Pública de Jerécuaro, Javier Trujillo Mendoza en agosto del 2008 que tras una persecución de su asesinos fue acribillado en el interior de su vehículo, en donde también falleció su esposa que iba de copiloto aunque la mujer salvo a su bebe al protegerlo entre sus brazos, el homicidio ocurrió en Chupicuaro municipio de Acámbaro.
Otro mas fue el homicidio de José Antonio García Jiménez también director de Policía en Jerécuaro en abril del 2011 a él lo mataron ceca de la central de autobuses.
Para las elecciones del 2009 en marzo de ese año Joaquín Ramos González candidato a la presidencia de Jerécuaro por el PRD fue secuestrado y liberado días después tras el pago de un rescate.
Otro caso que resalta es el del homicidio de los dos escoltas de Juan Joel Ruiz Troncoso quien fungía como director de Policía de Salvatierra en agosto del 2010, el ataque se dio en la carretera Salvatierra-Acámbaro, días después el propio Ruiz Troncoso fue ultimado cuando tomaba una bebida en un restaurante frente a la presidencia de Acámbaro ya había renunciado a su cargo; pues ya había sido director policiaco en La Piedad, Acámbaro, Salvatierra y Coroneo.
Por razones como estas las autoridades decidieron implementar el programa Escudo, instalar una base de operaciones de las Fuerzas del Estado y policía federal en Acámbaro y desde el año pasado Jerécuaro se integró a un modelo de mando único pero todo esto no basto para evitar el homicidio de Rogelio Sánchez Galán.