El pasado 13 de diciembre, el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) publicó la edición 2022 del Índice de Competitividad Urbana (ICU), ‘cuya finalidad es medir y entender qué factores específicos hacen a una ciudad atractiva para el talento y la inversión’. De acuerdo al IMCO, una ciudad competitiva maximiza la productividad y el bienestar de sus habitantes por lo que, a través del ICU, el Instituto evalúa las capacidades estructurales de las ciudades -y no solo las que permiten alcanzar dicha maximización. El ICU que concentran 62 por ciento de la población mexicana y el 83 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
El Índice se compone a partir de la medición cuantitativa de 69 indicadores agrupados en 10 subíndices; para cada uno de los indicadores y subíndices el ICU asigna un nivel de competitividad a partir de una escala con seis posibles calificaciones: competitividad muy alta, alta, media alta, media baja, baja o muy baja. En el análisis de los resultados el IMCO agrupa a las ciudades de acuerdo al tamaño de su población en 4 categorías: ciudades con más de un millón de habitantes, ciudades con una población entre 500 mil y un millón de personas, ciudades con una población entre 250 mil y 500 mil personas y ciudades con menos de 250 mil habitantes.
En la presente edición de la Columna haremos un repaso puntual de los resultados presentados para Celaya en la edición 2022 y una comparación con los resultados reportados en la edición del 2020. Con ello, podemos establecer el comportamiento de los elementos que dan competitividad a la ciudad en el período de recuperación de la crisis de salud por la Pandemia de COVID-19. En términos generales, Celaya avanzó dos lugares en el índice de competitividad en el grupo de ciudades entre 500 mil y un millón de habitantes, al pasar de la posición 21 en el 2020 a la 19 en el 2022. De 66 indicadores directamente atribuibles al municipio, Celaya mejoró en 39, se mantuvo sin cambios en 3 y retrocedió en 24. A nivel de los 10 subíndices, el municipio mejoró en 9 de ellos.
El primer subíndice es el de ‘Sistema de derecho confiable y objetivo’ el cual mide la seguridad pública y jurídica en las ciudades. Este es el único subíndice en el que Celaya retrocedió entre el 2020 y el 2022, al pasar de la posición 19 a la 23, la última en el grupo de ciudades de su tamaño., con un nivel de competitividad ‘media baja’. El municipio retrocedió en 3 de los 4 indicadores que componen el subíndice, al ver un incremento entre el 2020 y el 2022 de 3.8 a 4 vehículos robados por cada mil en circulación; un aumento de 61.7 a 99.5 homicidios por cada cien mil habitantes y un aumento de 0 a 0.4 secuestros por cada cien mil habitantes. El único avance se observó en la cantidad de delitos del fuero común por cada mil habitantes, que pasó de 29 a 24.8.
El segundo subíndice es el de ‘Manejo sustentable del medio ambiente’ el cual evalúa la capacidad de las ciudades para relacionarse de manera sostenible y responsable con los recursos naturales y su entorno. En este subíndice, Celaya avanzó 7 posiciones pero mantiene un nivel de competitividad ‘media baja’. El municipio retrocedió en 3 de los 5 indicadores del subíndice, mantuvo uno sin cambio y avanzó en uno. Los kilogramos diarios de residuos sólidos por habitante aumentaron de 0.7 a 0.8 entre el 2020 y el 2022; el consumo per cápita de metros cúbicos de agua aumentó de 85.8 a 87 y el consumo de kilowhats consumidos al año por cada millón de actividad económica aumentó de 29 mil a 31 mil. El único indicador en el que Celaya avanzó fue el número de desastres naturales que llegó a cero en el 2022.
El tercer subíndice es el de ‘Sociedad incluyente, preparada y sana’ a través del cual el ICU mide la calidad de vida de los habitantes a través de tres áreas: educación, salud e inclusión. En él, Celaya mejoró 6 posiciones pero mantiene un nivel de competitividad ‘media baja’. El municipio avanzó en 7 de 12 indicadores que componen el subíndice; los retrocesos se observaron en la cobertura educativa de la población de 0 a 14 años que pasó del 81.9 por ciento en el 2020 a 63.9 por ciento en el 2022, el porcentaje de aumento en la población altamente calificada, la participación de las mujeres en la Población Económicamente Activa (PEA) y los indicadores de personal de salud y camas de hospitalización por cada mil habitantes.
El cuarto subíndice es el de ‘Sistema político estable y funcional’ que mide el potencial de los sistemas políticos locales para ser estables y funcionales; Celaya avanzó 5 posiciones pero retrocedió en 3 de los 5 indicadores del subíndice, manteniendo un nivel de competitividad ‘media baja’. El municipio se vio negativamente impactado por una caída en los niveles de participación electoral que bajó del 54 al 43 por ciento en los procesos del 2018 y 2021, respectivamente. Hubo retrocesos, también, en el número de agresiones contra periodistas registradas por ‘Artículo 19’ que aumentó de 5 a 6 entre el 2020 y el 2021.
El quinto subíndice es el de ‘Gobierno eficiente y eficaz’ que evalúa a forma en que los gobiernos municipales son capaces de influir positivamente en la competitividad de sus ciudades; en él, Celaya avanzó 4 posiciones y alcanzó un nivel de productividad ‘media alta’. El municipio avanzó en 3 de 7 indicadores, se mantuvo en uno y retrocedió en 6. El impacto negativo en el subíndice se observó en temas de desarrollo urbano, al disminuir el porcentaje de viviendas nuevas construidas verticalmente y el acelerado crecimiento de la mancha urbana, lo cual compromete la política de lograr compactar las ciudades para aumentar la capacidad de los gobiernos locales para ofrecer servicios públicos de mayor calidad.
El sexto subíndice es el de ‘Mercado de factores eficiente’ a través del cual el ICU califica a eficiencia de los mercados de factores de producción, principalmente el laboral y de energía. Celaya avanzó dos posiciones en el subíndice pero mantiene un nivel de competitividad ‘media baja’. El municipio logró avances en 7 de los 10 indicadores del subíndice, al tener mejoras del 11 por ciento en el salario promedio mensual para trabajadores de tiempo completo, en el combate a la desigualdad salarial, en la reducción de porcentaje de población ocupada que trabaja más de 48 horas a la semana, en el incremento del porcentaje de empresas con más de 50 empleados y en la reducción del porcentaje de la PEA que trabaja en la informalidad.
El subíndice de ‘Economía estable’ es el séptimo del índice, y mide las principales características de las dinámicas y sectores presentes en las ciudades, así como la situación del crédito para empresas y familias. En este subíndice, Celaya avanzó 6 posiciones y logró un nivel de competitividad ‘media alta’. El municipio observó avances en los 4 indicadores que componen el subíndice, pues casi triplicó el monto de créditos a las empresas por cada mil pesos de actividad económica, aumentó de 15 a 16 el número de créditos hipotecarios por cada mil adultos, aumentó el porcentaje del PIB en sectores que crecen a una tasa superior al promedio nacional y aumentó de 641 a 663 el número de sectores económicos presentes en el municipio.
El octavo subíndice es el de ‘Sectores precursores de clase mundial’ que evalúa el desempeño de los sectores financiero, de telecomunicaciones y de transporte en el municipio. Celaya avanzó 9 posiciones en el subíndice, pero aun así mantuvo un nivel de competitividad ‘medio baja’. El municipio logró avances en los 6 indicadores que componen el subíndice, al observar un incremento del 84 al 88 por ciento en el número de hogares con teléfonos celulares, avances del 25 al 34 por ciento en el número de hogares con computadora e internet, reducciones de 77 a 36 víctimas de accidentes relacionados con el transporte, por cada 100 mil habitantes; así mismo, se lograron avances en inclusión financiera y en inversión en infraestructura urbana para la movilización no motorizada.
El noveno subíndice es el de ‘Aprovechamiento de las relaciones internacionales’, a partir del cual el IMCO analiza el grado con el cual las ciudades capitalizan sus lazos con el exterior para elevar su competitividad. En él, Celaya avanzó 3 posiciones pero mantiene un nivel de competitividad ‘media baja’. El municipio retrocedió en los 3 indicadores que lo componen al disminuir entre el 2020 y el 2022 la captación de inversión extranjera directa, el porcentaje de la oferta total de cuartos que son de 4 ó 5 estrellas y el porcentaje de ocupación hotelera.
El décimo subíndice es el de ‘Innovación de los sectores económicos’ el cual mide la capacidad de las ciudades para competir con éxito en la economía, particularmente en sectores de alto valor agregado, intensivos en conocimiento y tecnología de punta. En este subíndice, Celaya avanzó 4 posiciones y alcanzó un nivel de competitividad ‘media alta’. El municipio mejoró en 4 de los 5 indicadores que lo componen, al observar avances en el número de empresas en el ranking top 500 de CNN, en el crecimiento anual de la productividad de los factores, avances en el número de posgrados de calidad y centros de investigación.
De esta forma, el municipio de Celaya muestra evidentes claroscuros en los elementos que determinan la competitividad del municipio; las principales fortalezas descansan en la situación de la dinámica económica y el avance en la innovación de los actores económicos. Pero muestra graves rezagos en el tema del estado de derecho, por efecto de la ausencia de paz en el municipio, principalmente en la incidencia de homicidios. En este sentido, Celaya ocupa la posición 62 entre los 66 municipios analizados por el IMCO.
La virtud del justo medio
De las 66 ciudades en las que el IMCO mide los indicadores de competitividad, Celaya ocupa la última posición como el municipio en el que se observa el mayor porcentaje de personas que laboran más de 48 horas a la semana, el 47 por ciento de las y los celayenses ocupados. Al mismo tiempo, el salario promedio mensual para un trabajador de tiempo completo es 39 por ciento menor al observado en la ciudad con el mejor desempeño en esta variable, Hermosillo. Aumentar la productividad del trabajo y con ello las aspiraciones salariales depende en mucho de lograr atraer inversiones que requieran mayores competencias laborales. Ahí la tarea a realizar.