COMONFORT, GTO. 12 DE DICIEMBRE 2023.-Las campanas repicaban, la pirotecnia tronaba hasta el cielo, los rezos y ofrendas eran expuestas, mientras que el Santuario de Guadalupe en Comonfort recibió a decenas de familias en su día.
Desde muy temprano los devotos fueron llegando, las misas eran celebradas y los festejos se fueron desarrollando.
Sobre la calle de Matamoros, los puestos de comida, antojitos, botanas y flores atendían a los fieles que iban llegando al templo o saliendo del mismo.
Como es costumbre, las mañanitas y la canción de “La Guadalupana” eran las más sonadas, música que fue acompañada de aplausos y porras a la festejada.
Mientras que en el atrio del templo, el escenario para la noche se iba instalando, los pequeños danzantes se iban preparando y la gente se fue congregando.
A las doce y media, comenzó una de las misas, en la cual los devotos escucharon con atención, mientras que el padre leía el evangelio el pasaje donde la Virgen María visitó a su prima Santa Isabel, y en aquel saludo, el niño se alegró desde el seno de su madre.
En su mensaje habló de cómo María dijo sí sobre todas las cosas, creyó en la palabra de Dios, y por ello, recibió todo el favor divino.
Haciendo la comparación con San Juan Diego, el joven “indito” que también creyó en la virgen, también fue humilde ante la Virgen Morena y como su ayate, es el símbolo de esa confianza entre lo divino y lo terrenal.
Para los enfermos y adultos mayores, se les ungió con aceite mientras se pedía por ellos.
Al finalizar la misa, a un costado, se le dio de comer a los adultos mayores, y en el atrio, el festejo continuó, la Danza Femenil de las Rosas de Comonfort y la Danza de Apaches de Don Juan Diego hicieron gala de su talento, mientras los cohetes tronaban, siendo una fusión mística de lo prehispánico y la corriente católica que llegó al país.