IRAPUATO, GTO.- Aún con la pandemia de COVID-19, en medio de restricciones y medidas sanitarias, la fe, el fervor y las tradiciones por el Día de Muertos siguen vivos.
En Irapuato este martes 2 de noviembre los seis panteones: el municipal, los tres privados dentro de la zona urbana (Los Olivos, Guadalupano y Recintos de la Oración) y los dos públicos en comunidades (en Aldama y Cuchicuato), abrieron sus puertas a las 8 de la mañana y cerrarán a las 6 de la tarde.
Como medidas de seguridad y sanitarias establecidas por Protección Civil y la Jurisdicción Sanitaria VI, no se permitió el acceso a niños y a mujeres embarazadas, y aún cuando se anunció que tampoco a adultos mayores, estos de última hora sí pudieron ingresar.
En cada panteón, personal de Protección Civil llevaba el control de la entrada y salida, con apoyo de Seguridad Pública, regalaban gel antibacterial y cubrebocas y, entre la molestia de los visitantes, no permitieron el ingreso de botellas y botes con agua para evitar la proliferación de los mosquitos transmisores del dengue, zika y chikungunya.
Aún así, el fervor no se detuvo, ya que los seis panteones se llenaron de arreglos, ramos y coronas florales, entre rosas, girasoles, alcatraces, entre la flor de cempasúchil, de crisantemo, nube y de terciopelo rojo.
Respecto a la reactivación económica, se permitió el ambulantaje entre negocios de comida, ropa, frituras, aguas frescas, pan de muertos, juguetes y juegos mecánicos.
Asimismo, en el municipio de Abasolo los panteones cerrarán a las 5 de la tarde, mientras que en Pénjamo será a las 11 de la noche. En Salamanca los cinco panteones estarán abiertos de 8 de la mañana a 5 de la tarde y no se permitirá la entrada de grupos vulnerables como niños menores de 12 años y mujeres embarazadas.